martes, 1 de julio de 2008

Mamá y papá a la vez

Hoy en día son muchas las mujeres que deciden enfrentar su embarazo y asumir la maternidad solas. Claro que no es algo sencillo y suele acarrear grandes dudas, angustias y sentimientos de culpa. Pero es posible salir adelante. El gran miedo es saber si van a ser como madres, lo suficientemente buenas porque falta un padre para ese hijo, sienten culpa por ello más alla que hayan elegido esta situación.

Muchas veces las mamás que están solas creen que tienen que ser "súpermadres" y cumplir las dos funciones. Pero esto es una utopía : nadie puede cumplir dos funciones al mismo tiempo, porque son dos funciones bien diferenciadas que apuntan a dos lugares bien distintos en relación a la estructuración psíquica del niño.
Saber esto ayuda a bajar el nivel de ansiedad y de autoexigencia materna respecto a satisfacer todas las demandas y necesidades del hijo, pudiendo así encarar una maternidad mas realista, menos exigente, mas tranquila y dando lugar para poder reconocer las capacidades, posibilidades y potencialidades de cada mujer respecto de su maternidad.
Hay funciones que son típicas del papá que una mamá sola sí va a poder encarar, pero no todas. Es bueno saber cuáles son las posibilidades reales, tomando conciencia de esta realidad, una madre puede tranquilizarse mucho.

¿El papa no existe?

Además hay algo fundamental: la transmisión de la idea de un padre en un hijo siempre existe.
Toda mujer tiene el registro de la existencia de un hombre que cumplio dicha función, tanto inconsciente como conscientemente.
Inconscientemente, através de lo que se denomina el" mito familiar", formado tanto por lo dicho, como por lo no dicho, por lo esperado, lo deseado, por el lugar que viene a ocupar ese niño, no solo en la madre sino en la familia, allí se encuentra la función paterna. Concientemente através del apellido, que no puede ser sino de un hombre. Todo apellido es siempre de un padre. Esto es un hecho cultural y también universal.

¿Un padre imaginario?

Mas alla de que no este cubierto este rol en la realidad , siempre la madre porta en sí misma la función de un padre. Saber esto ayuda mucho a la mamá que cree que su hijo no va a tener la imagen de un hombre, y calma la ansiedad y la culpa que siente por esta situación.

Para tener en claro

Sería conveniente que la madre este preparada para responder lo que en el futuro su hijo le pueda preguntar para que no la tome por sorpresa, aunque siempre van a haber preguntas que la van a descolocar respecto a la paternidad.

No mentir: Es un punto crucial, por más cruel y dura que sea la verdad. Siempre hay maneras de decir las cosas.
Se le puede explicar que ese papá, por diferentes motivos, no pudo, no supo, o las circustancias que rodearon la concepcion, no pudo hacerse cargo de su paternidad.
La trasmision de estos hechos, más el cariño y el amor que la madre le brinde a su hijo, generará en él seguridad y confianza.
No sobreproteger: Las madres que están solas tienen tendencia a sobreproteger a los hijos, y esto no es bueno porque en algún momento estos chicos van a tener que ir al jardín y toparse con la realidad, con compañeritos que pueden ser muy crueles en sus apreciacines y o comentarios. Por ese motivo es importante explicar las cosas lo mas claramente posible.
Pedir ayuda: La madre muchas veces tiene que elaborar toda esta situación mediante una terapia personal, quizá antes de tener al bebé o después.También puede ser muy útil buscar ayuda en la familia o en los amigos. Ayuda que puede ser afectiva, emocional o económica... porque estar sola con un hijo se puede un poco tornar difícil a veces.
Poner límites: Otro creencia de las madres solas es pensar que sus hijos no tienen que sufrir, o sentir frustraciones porque ya sufren demasiado por no tener un papá.Pero también deberían pensar que no se sufre por algo que nunca se tuvo y que en realidad el sentimiento de falta es mas de ellas. Con esta idea muchas veces evitan ponerle límites y se tornan permisivas con el niño.

Las nuevas familias

Los modelos de familia hoy cambiaron mucho, cada vez son más comunes las "familias ensambladas, ampliadas o monoparentales". Todas son igual de válidas, y es bueno que el niño lo sepa. Lo importante es el afecto y la contención de todo el núcleo familiar. El rol materno y paterno no tienen que ver necesariamente con la convivencia de los padres.
La función del padre puede ser cumplida y ejercida de la misma manera, porque depende de cómo se actúa, se decide, se educa, se comprende, se ama al niño.
Así como una de las funciones del rol paterno es poner límites, ser autoridad, separar a la madre del niño, otra es la de la socialización, hechos que ella misma aunque lo intentará no podría hacer sola.
Muchas veces el pequeño, busca en un maestro, en un entrenador de fútbol, en un sacerdote, en un hermano u amigo mayor, alguien que la ayude a separse de su madre y objetivar la realidad desde otro lugar.
Todo ser humano necesita tomar distancia, separarse para poder objetivar.

Desde Revista Bebé a Bordo

2 opinaron:

Gu1ta dijo...

Totalmente de acuerdo. Somos mamás, no mamás y papás. Cada quien asume su rol y su realidad en la vida, y me encanta eso.
Además la crianza tiene que basarse en la verdad, si no, no prepararemos niños libres, serenos y felices. Es difícil, pero no creo que nadie tenga ni la receta, ni la salida. Criar es difícil para todos. Hace falta mucho amor y fé.
Besos a todas

Fiorella Valera dijo...

hola me gusto mucho tu blog y me gustaria que interbambiemos enlaces espero tu respuesta.
www.travesurasdebebes.blogspot.com